Un juego, 4 jugadores, una caja… El proyecto consistía en darle juego a la caja, que fuera un pack diferente, divertido, funcional y atractivo en el punto de venta.
Para hacerlo funcional desarrollamos una caja que al mismo tiempo fuera el tablero de juego: destapar, desplegar y listo para jugar. Fácil y divertido. ¿Y para el punto de venta? Cuatro cajas en una. Cada cara con un gran topo de color que, una caja junto a otra, creaba una sugerente composición cromática. Y con el logo siempre presente. ¿Jugamos?